Sus creaciones son inconfundibles y perfectas para la alfombra roja pero ¿por qué siguen desfilando durante la New York Fashion Week? No es que me no me gusten ni que quiera que dejen de desfilar pero, ¡no lo entiendo! Se supone que el Prêt-à-Porter nació para pisar las calles y, seamos francos, una vestido de Marchesa no es la mejor opción para ir a la compra, ni al trabajo, ni siquiera a una cena romántica, a no ser que seas Eva Longoria, claro...
Y, entonces, ¿por qué siguen en NYC? A parte de por ser su ciudad, supongo que desde la Cámara de la Moda de París no deben ayudar demasiado dada su pasión por el elitismo. Desde The Acid quiero mandar una proposición: intercambiar el desfile de Armani Privé en la Haute Couture por el de Marchesa en la Fashion Week de New York.
Es simple: Marchesa reúne las cualidades exigidas por la Cámara de la Moda. Telas exquisitas, número limitado de propuestas, trabajo artesanal... ¿Lo hace Armani Privé? No lo creo, al menos no se aprecia durante los desfiles, así que esperemos que este cambio llegue algún día y podamos ver a estas dos mujeres disputarse con Galliano el puesto al mejor vestido de la HC.
Fotos: Style.com + Poladroid.com
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